Nro. 16, 2016. Laura Golovanevsky. Género y cuidado. Apuntes y evidencia empírica para un análisis preliminar
Si bien la necesidad de la reproducción de la vida –en todas sus dimensiones- existe desde el momento en que hay vida humana, la separación entre una esfera productiva (pública) y una esfera reproductiva (privada) se da específicamente a partir del cambio en el orden económico. En ese momento se cristaliza la división entre trabajo productivo (a cambio de un salario) y trabajo reproductivo (sin remuneración), expresada también en términos de división sexual. Serán las mujeres las encargadas de la reproducción biológica, social y de la fuerza de trabajo.
Con el tiempo, la mujer logró mayor acceso, tanto a la educación como al mercado laboral. Si hombres y mujeres trabajan en el ámbito extra-doméstico por igual, ¿cómo se organizan las tareas reproductivas que son indispensables para la vida cotidiana? ¿qué ocurre con las tareas de cuidado que tradicionalmente desempeñó la mujer?
En relación a estos interrogantes se desarrolla en el trabajo una discusión acerca de la noción de cuidado y de la organización social del mismo, incluyendo algunos resultados empíricos obtenidos mediante el procesamiento de la Encuesta sobre Trabajo No Remunerado y Uso del Tiempo llevada a cabo en Argentina durante el tercer trimestre de 2013.
Descargar: Documento de Trabajo N° 16 IELDE